martes, 30 de marzo de 2010

QUE ES CUBA PARA MI?

Me inspire en algo que me mandaron...y le añadí lo mío...a quien le guste que lo copie y le añada lo suyo...tal vez se inicia una cadena. Los americanos tienen una sola patria, los EEUU. Nosotros tenemos dos...los EEUU y Cuba. Ellos tienen sus héroes nacionales, como Washington, Hamilton y Lincoln. Yo tengo esos mismos, pero también tengo los míos, como Céspedes, Martí, Maceo y José Antonio Echevarría.
Tienen una cultura, nosotros tenemos dos. Me como una hamburguesa con el mismo gusto que me como una frita. Para mí un melocotón sabe tan delicioso como una fruta bomba. Nunca pensaría de un arroz con huevos fritos sin kétchup. O una Nochebuena sin frijoles negros, arroz, yuca y carne de puerco. Ellos tienen Thanksgiving y nosotros también pero con congrí y yuca. Ellos tienen un idioma, pero nosotros tenemos tres: ingles, español y spanglish.
Para mi Cuba no es una palabra. Cuba es como un credo, como una religión. Tengo a Cuba en un altar. Cuba es una obsesión. Cuba es una palabra que, cuando el noticiero la menciona, yo sé que me tengo que quedar callado para prestar toda mi atención a lo que dicen. Cuba es como una sombra que me sigue a todas partes. Cuba está en mis conversaciones, en mis discusiones, en mis fiestas, en lmis velorios, en mis emails, en periódicos que leo. Un artículo sobre Cuba me llama la atención y tengo que leerlo y guardarlo. Vivo buscando cosas de Cuba en Internet.
¿Qué dónde está Cuba? Si alguien me lo pregunta, yo le señalaré con el dedo índice a mi pecho... olvídense de Google Earth. Cuba, según este programa cibernético, está en el Caribe, pero la verdad es que Cuba está dentro de mí, en mi hogar, en mi carro, en mi trabajo. Cuba está dentro del refrigerador de mi casa, en el balcón de mi casa, en la comida que preparo, en los libros que leo, en mis escritos, en el cafecito diario. Cuba siempre está en mis recuerdos y en mis oraciones. Todos los días de mi vida camino por las calles de Santa Clara, me siento en el Parque Vidal, voy al Teatro Silva, me como un platillo volador en La Cremehelada o una grasosa-pero-sabrosa frita en la Plaza del Mercado.
Cuba: antes, ahora y después....Cuba, siempre!

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